La ofensiva de las Ardenas de 1944. KAMPFGRUPPE PEIPER EN LAS ARDENAS, 1944. Sergio Martínez

El 16 de diciembre de 1944, Hitler jugó su última carta desesperada. Lanzó una gran ofensiva en las Ardenas, el mismo escenario donde, cuatro años y medio antes, había logrado una de las mayores victorias militares de todos los tiempos. Esta vez, sin embargo, las circunstancias eran radicalmente distintas. La tropa alemana no tenía la misma calidad ni formación, la Luftwaffe no controlaba los cielos, y los suministros de combustible, munición e incluso alimentos eran dramáticamente escasos. El terreno helado y embarrado del invierno no era el mismo que el de la primavera de 1940. Los imponentes carros pesados Tiger II y Panther no se comportaban como los ágiles Panzer II y III de antaño. Además, no había maniobras de distracción que pudiesen confundir a los Aliados. Todo se centraba en un único golpe decisivo. Por su parte, su enemigo estaba bien preparado, motivado y listo para luchar hasta el final. De entre todas las unidades alemanas que participaron en la ofensiva, hubo una que acaparó la atención tanto de sus propios mandos como de sus enemigos: el Kampfgruppe Peiper.

Perteneciente a la División Leibstandarte, esta formación tenía la misión de liderar el avance por el sector norte del Sexto Ejército Panzer de las SS, abriéndose paso hasta el río Mosa. A través del seguimiento de esta unidad, es posible entender todos los obstáculos a los que se enfrentaron los alemanes en las Ardenas, convirtiéndose en el mejor ejemplo para comprender por qué fracasó la última gran ofensiva en el Frente Occidental.

QUIERO EL LIBRO

Publicado en Kampfgruppe Peiper en las Ardenas, 1944 | Etiquetado , , , | Deja un comentario

El hundimiento del Taiho. LA GUERRA DE PORTAAVIONES EN EL PACÍFICO. Mark E. Stille

El primero en atacar fue el USS Albacore. Como ya se mencionó, este submarino logró situarse en medio de la 1.ª División de Portaaviones japonesa mientras ésta lanzaba sus aviones. A las 09.09, el capitán del Albacore estaba en posición de disparar una salva completa de torpedos contra el Taiho. Uno de ellos impactó en la amura, a la altura del elevador delantero. Además de bloquear su mecanismo, la onda expansiva de la explosión agrietó el tanque de gasolina de aviación de proa. El personal de control de daños cometió el error fatal de utilizar el sistema de ventilación del buque para disipar los vapores del combustible de aviación y del crudo de Tarakan, altamente volátil, que se esparcieron por todo el navío. Eso convirtió al Taiho en una bomba flotante. Lo inevitable ocurrió a las 15.32, cuando una enorme explosión sacudió el portaaviones, levantando la cubierta de vuelo y desgarrando orificios en el casco. Cuando el buque quedó más o menos estabilizado, Ozawa y su estado mayor fueron evacuados por un destructor. El Taiho se hundió más tarde, llevándose consigo las vidas de 660 tripulantes.

QUIERO EL LIBRO

Además, si eres miembro del CLUB SALAMINA, te llevas de regalo nuestro vigésimo primer Boletín Salamina. Si aún no te has registrado, puedes hacerlo durante el proceso de compra.

LA CARTA PERDIDA DE MIDWAY: Una carta manuscrita perdida, encontrada literalmente en un cofre de marinero, añade la última pieza que faltaba al rompecabezas de los momentos más decisivos de la batalla de Midway.

Publicado en La gurera de portaaviones en el Pacífico | Etiquetado , , , | Deja un comentario

El desgaste innecesario de los grupos aéreos japoneses. LA GUERRA DE PORTAAVIONES EN EL PACÍFICO. Mark E. Stille

La fuerza aérea de la Marina japonesa sufrió terribles daños en las cuatro batallas de portaaviones de 1942. Seis portaaviones (cuatro de flota y dos ligeros) resultaron hundidos en estos enfrentamientos. Y lo que es más importante, las pérdidas entre las tripulaciones de vuelo altamente entrenadas de antes de la guerra fueron extremadamente elevadas.

Se estima que de los 765 tripulantes que participaron en el ataque a Pearl Harbor, 409 perdieron la vida en 1942. Cuando los japoneses evacuaron Guadalcanal en enero/febrero de 1943, el desgaste de las tripulaciones aéreas embarcadas japonesas continuó. A fin de proteger su bastión en Rabaul, los japoneses combatieron de manera encarnizada contra el avance estadounidense por las Islas Salomón.

El poder aéreo japonés con base en tierra demostró su incapacidad para de detener a los norteamericanos, por lo que el comandante de la Flota Combinada se vio sometido a una presión continua para que enviase los grupos aéreos de los portaaviones con base en Truk en ayuda de las fuerzas aéreas basadas en tierra de Rabaul. Los japoneses trasladaron sus grupos aéreos de portaaviones al sur, a Rabaul, hasta en tres ocasiones.

QUIERO EL LIBRO

Además, si eres miembro del CLUB SALAMINA, te llevas de regalo nuestro vigésimo primer Boletín Salamina. Si aún no te has registrado, puedes hacerlo durante el proceso de compra.

LA CARTA PERDIDA DE MIDWAY: Una carta manuscrita perdida, encontrada literalmente en un cofre de marinero, añade la última pieza que faltaba al rompecabezas de los momentos más decisivos de la batalla de Midway.

Publicado en La gurera de portaaviones en el Pacífico | Etiquetado , , , , | Deja un comentario

Primera oleada de torpederos en Pearl Harbor. LA GUERRA DE PORTAAVIONES EN EL PACÍFICO. Mark E. Stille

En apenas 11 minutos, y con la pérdida de sólo cinco aviones (y un sexto que se vio obligado a amerizar más tarde), los torpederos japoneses hundieron dos acorazados norteamericanos e infligieron daños que provocaron el hundimiento de otros dos. A esto se sumó el hundimiento de un buque blanco para prácticas y un minador, así como daños a dos cruceros ligeros. De los 36 torpedos lanzados, es probable que 19 consiguiesen impactos. La escabechina podría haber sido mayor si los pilotos japoneses no se hubiesen concentrado en el Oklahoma y el West Virginia. Se lanzaron un total de 12 torpedos contra el Oklahoma e impactaron al menos cinco. El navío encajó tres torpedos en rápida sucesión y comenzó a escorarse a babor de inmediato. No se hizo ningún intento de contrarrestar la inclinación, por lo que el barco zozobró en 15 minutos, lo que supuso una gran pérdida de vidas, en concreto, 20 oficiales y 395 marineros. Según las estimaciones, el West Virginia fue alcanzado por siete torpedos. Las órdenes de los oficiales subalternos, que reaccionaron con rapidez, de inundar los compartimientos de la banda de estribor, evitaron que el navío zozobrase. Las bajas fueron más contenidas, con dos oficiales y 103 marineros muertos.

QUIERO EL LIBRO

Además, si eres miembro del CLUB SALAMINA, te llevas de regalo nuestro vigésimo primer Boletín Salamina. Si aún no te has registrado, puedes hacerlo durante el proceso de compra.

LA CARTA PERDIDA DE MIDWAY: Una carta manuscrita perdida, encontrada literalmente en un cofre de marinero, añade la última pieza que faltaba al rompecabezas de los momentos más decisivos de la batalla de Midway.

Publicado en La gurera de portaaviones en el Pacífico | Etiquetado , , , , | Deja un comentario

La Kido Butai. LA GUERRA DE PORTAAVIONES EN EL PACÍFICO. Mark E. Stille

Una ventaja importante que aprovecharon los japoneses al comienzo de la contienda fue su capacidad para concentrar el poder aéreo de los portaaviones. La Kido Butai («Fuerza Móvil» en su literalidad, aunque mejor traducida como «Fuerza de Ataque») era el componente operacional de la 1.ª Flota Aérea. A diferencia de la Marina estadounidense, donde la división de portaaviones solo tenía funciones administrativas, las divisiones de portaaviones de la Kido Butai eran entidades operativas. Los grupos aéreos de los portaaviones de cada división entrenaban y combatían juntos de forma habitual. Durante las operaciones con varios portaaviones, el ataque en su conjunto sería mandado por uno de los comandantes del grupo de portaaviones, que dirigiría las operaciones.

En un ataque a gran escala, una división de portaaviones contribuiría con sus escuadrones de bombarderos en picado y otra con sus escuadrones de torpederos. Eso permitía lanzar el ataque con gran rapidez, ya que todos los aviones podían situarse en la cubierta de vuelo sin necesidad de reservar espacio en la misma a otros grupos de aviones que hubiese que preparar para el despegue. Normalmente, la fuerza de ataque iba acompañada de una escolta de entre seis y nueve cazas de cada portaaviones. La creación de la 1.ª Flota Aérea fue revolucionaria en su concepto. Proporcionó a los japoneses los medios para concentrar el poder aéreo en cualquier punto del Pacífico. Esta fuerza aérea masiva nipona estaba integrada por aviones muy sofisticados pilotados por aviadores expertos, lo que hizo posible que la Marina Imperial abrumase las defensas aliadas al comienzo de la guerra.

QUIERO EL LIBRO

Además, si eres miembro del CLUB SALAMINA, te llevas de regalo nuestro vigésimo primer Boletín Salamina. Si aún no te has registrado, puedes hacerlo durante el proceso de compra.

LA CARTA PERDIDA DE MIDWAY: Una carta manuscrita perdida, encontrada literalmente en un cofre de marinero, añade la última pieza que faltaba al rompecabezas de los momentos más decisivos de la batalla de Midway.

Publicado en La gurera de portaaviones en el Pacífico | Etiquetado , , , , | Deja un comentario